Estudio concluye que las caderas anchas y los traseros prominentes benefician a la salud reduciendo posibilidades de diabetes y enfermedades cardiovasculares.
Tener un buen trasero, además de acaparar las miradas masculinas, sería beneficioso para la salud. ¿Cómo así? Científicos de la Universidad de Oxford ha concluido que las mujeres con dicha característica podrían tener una vida más larga.
La investigación consistió en comparar la grasa que se acumula en la parte baja del cuerpo con la que se acumula en la parte abdominal. Así, encontraron que la primera previene el desarrollo de diabetes, ya que tiene hormonas muy benéficas que ayudan a metabolizar azúcares y grasas de una mejor manera. Por lo general, ello ocurre en los cuerpos de pera, es decir, abdomen plano y caderas muy anchas.
Por otro lado, la grasa acumulada en las caderas elimina lípidos dañinos y contiene antiinflamatorios que evitan la obstrucción de las arterias. Lo cual ayuda a evitar enfermedades cardiovasculares. También los investigadores compararon datos de 16 mil mujeres, concluyendo que al comparar las medidas de la cadera con la cintura, la proporción ideal resulta de 0.6 y 0.7.
Ojo, que no se aconseja enfocarse en comer más para que crezcan las caderas, ya que las características mencionadas son beneficiosas en cuanto son hereditarias, más no cuando se abusa de las comidas grasosas.
En, los glúteos y caderas grandes, eternos mimados de los hombres, se imponen ahora como una muestra de buena salud.
