La actividad física en la piscina tiene muchas ventajas. Los ejercicios para adelgazar en el agua permiten quemar grasa y tonificar el cuerpo rápidamente.
En estos meses de calor, la actividad física ideal es la natación pues nos mantiene frescas y en forma al mismo tiempo. Está comprobado que nadar es el ejercicio más completo pues ejercita todos los músculos del cuerpo evitando la acumulación de grasas y tonificando las zonas más difíciles de trabajar. Si estás buscando ejercicios para adelgazar rápidamente y evitar la molesta sudoración, esta rutina es para ti.
Este tipo de actividad física tiene múltiples beneficios. Uno de ellos es que proporciona más control y estabilidad, por lo que es ideal para personas que sufren de las articulaciones o aquellas que están en un proceso de rehabilitación. Otra ventaja es la densidad del agua la cual es 830 veces más alta que que el aire, por lo cual requiere más esfuerzo de parte de uno mismo. De esta manera la cantidad de glucógeno, responsable de regular la glucosa en el organismo, se agota antes por lo que la grasa se elimina de manera rápida. Por otro lado, también se pierde más calor corporal dentro del agua lo que hace que se gaste mucha más energía.
Nadar podría hacerte perder hasta 2500 calorías en solo una semana. Así que manos a la obra. Qué mejor manera que ejercitarte de forma sencilla y evitando el incómodo calor y el bochorno de los meses de verano.
Lo primero que debes tener en cuenta es la temperatura de la piscina. Si el agua está muy fría podrías sufrir algún agarrotamiento muscular, lo que te puede causar mucho dolor y entumecimiento. Por otro lado, si la temperatura del agua está muy elevada, interfiere negativamente en la disipación del calor por el cuerpo, lo cual recarga el sistema circulatorio y hace que te canses más fácilmente y disminuyas tu rendimiento.
Lo siguiente que debes considerar es el calentamiento. Hacer esta rápida rutina sirve para evitar calambres y lesiones. El objetivo es que puedas estirar todo tu cuerpo empezando por la espalda y continuando por los brazos y piernas. Estas zonas son las que más trabajan bajo el agua.
El primer ejercicio ideal para empezar a quemar la grasa de las zonas más difíciles es caminar debajo del agua. Debes sumergirte de tal manera que el agua te tape hasta un poco más arriba de la cintura. Camina hacia adelante con las manos colocadas en la cintura y los codos en la superficie. Intenta acelerar un poco conforme vas avanzando. Luego realiza la misma rutina pero caminando hacia atrás.
El siguiente ejercicio consiste en entrar a la piscina y sumergirte de tal manera que el agua te llegue hasta un poco más abajo de los hombros. Debes colocar los brazos en cruz con las manos abiertas y moverlos hacia adelante y hacia atrás. La rutina consta de 40 repeticiones rápidas. Debes tratar de moverte con mucha fuerza y sentir que tus músculos van trabajándose.
Por último este ejercicio sirve para trabajar los glúteos, una zona importante para tener un físico espectacular. Sitúate en el borde de la piscina y flexiona la rodilla derecha, luego estírala haciendo fuerza contra el agua. Hazlo lentamente realizando patadas hacia atrás y adelante. Haz lo mismo con la pierna derecha.
¿Qué esperas para refrescarte y conseguir un cuerpo de impacto con estos prácticos ejercicios para adelgazar debajo del agua?