Antes y después de depilarte, debes tomar en cuenta el tratamiento que tiene que pasar tu piel. Te enseñamos algunos trucos de depilación.
Antes de la depilación
Conviene mantener nuestra piel bien exfoliada, así eliminaremos las células muertas y obtendremos una piel mucho más limpia. Para ello, uno o dos días a la semana haremos este tratamiento durante la ducha, con un guante de crin y un poco de gel con PH neutro masajear las piernas. También puedes utilizar cremas exfoliantes o hidratante.
Se recomienda asimismo una ducha caliente antes de la depilación, el calor hace que los poros se abran. De este modo, la depilación será menos indolora y más eficaz.
Después de la depilación
Luego de depilarte toma una ducha de agua fría, y también con un cubito de hielo frótate, esto calmará la piel y cerrará los poros. Además podemos aplicar cremas hidratantes, aceite de almendras o del árbol del té o manteca de karité. Repetir la aplicación una o dos veces a lo largo de las 24h siguientes, sobre todo si la piel tiene tendencia a infectarse.
El primer día después de la depilación mantén la zona limpia y protegida de más agresiones hasta que se recupere. Al día siguiente podrás hacer los retoques y lucir tu piernas perfectas. Así que nada de sol, pinzas ni aplicar cremas con productos químicos agresivos.
Después de estos retoques, limpia bien la piel con agua y jabón suave o manteca de Kárite. El tener bellas piernas, está en el cuidado que le des a la piel. Así que al depilarte sigue estos consejos, que permitirán que tu piel no esté irritada.