Que nuestro sueño sea profundo y dure más de siete horas es beneficioso para entre otras cosas bajar de peso y evitar enfermedades.
A veces la rutina del trabajo, los niños o el estudio, hacen que muchas de nosotras sacrifiquemos algo que es muy importante: nuestro sueño, sin embargo esto puede ser más perjudicial de lo que se ve a simple vista, ya que esa puede ser la razón por la que no podamos bajar de peso.
Dormir bien sumado a una buena rutina de ejercicios, hace que nuestro organismo produzca mayor número de hormonas de crecimiento. Este elemento acelera el metabolismo y ayuda a quemar la grasa de nuestro cuerpo.
Por esta razón es importante que sumado a una dieta equilibrada y una adecuada rutina de ejercicios, acostumbremos a nuestro organismo a dormir al menos siete horas cada diarias. Además para que el sueño tenga una efecto positivo en nuestro metabolismo este debe ser profundo y sin interrupciones.
Dormir defectuosamente o sufrir de insomnio además de generar obesidad, aumenta el riesgo de padecer enfermedades como la diabetes, depresión, hipertensión y hasta cáncer, del mismo modo también afecta el estado de nuestra piel y cuero cabelludo, produciendo caída del cabello y acné.
Asimismo cuando nuestro cuerpo no descansa adecuadamente, hace que tengamos más apetito y por lo general nuestro deseo por comida poco saludable como los pasteles y golosinas aumente considerablemente.
Por otro lado los beneficios de dormir durante la noche no se replican cuando se duerme de día, es por este motivo que los que trabajan durante la madrugada tienden a tener problemas de sobrepeso e incluso obesidad, lo recomendable es evitar las trasnochadas.
Además de bajar de peso una buena dosis de sueño es muy importante para mantenernos saludables y con buen humor, así podremos estar listas en óptimas condiciones para los retos que día a día afrontamos.